El Azul Maya es el primer pigmento complejo permanente creado por el ser humano en América. A lo largo de su historia, ha tenido diferentes ciclos de uso y durante la colonia tardía cayó en un período de latencia. Este azul ha recibido mucho interés en las últimas décadas, por parte de científicos y arqueólogos, debido al atractivo de su tono y su resistencia al pasado del tiempo.
Fue identificado dentro del mundo académico extranjero en los años 30 y se convirtió en objeto de varios análisis químicos partir de los años 60, donde se comenzaron a generar aportaciones al análisis del componente orgánico, añil, al de la paligorskita y del calor, por ejemplo. En este contexto, el aporte de investigadores como Constantino Reyes Valerio y Dean Arnold ha sido fundamental para entender, por ejemplo, los métodos de producción.
Últimamente han surgido nuevas aproximaciones en torno a la producción y comprensión del Azul Maya, junto con experimentaciones del material por parte de artistas en la península de Yucatán. El interés de Lorena Ancona y Luis May se ha enfocado en encontrar el añil orgánico en la península del Yucatán, volviendo al vínculo del tinte con la zona. El Centro de Excelencia Santo Domingo para la Investigación sobre Latinoamérica (SDCELAR) en el Museo Británico ha trabajado colaborativamente con Lorena Ancona y Luis May, y ellos por su parte han trabajado en conjunto con varios artistas y agricultores de la zona, que tienen conocimiento de tintes naturales, arcillas, y tierras relacionado a la alfarería, como Alma Valencia, Crisanto Kumul, Eulogio Kumul, Gaspar Courtenay y Manuela Chi May.
Eulogio Kumul Mas, junto a Lorena Ancona descubrió la planta de añil (Ch’oj) en su milpa creciendo al lado del maíz. Eulogio hace hincapié en uso tradicional que el Ch’oj ha tenido en su comunidad, como planta medicinal utilizada para la caída del cabello. Lorena Ancona siempre estuvo interesada en la producción a pequeña escala con miras a una producción más grande a través de un centro de experimentación para materiales naturales en la península de Yucatán, llamado Kaancab con un enfoque en la cerámica. La artista busca compartir este conocimiento con células alrededor de la península, especialmente con mujeres.
Luis May se ha enfocado en la producción a gran escala del añil para experimentar con el Azul Maya, movilizando su proyecto en su comunidad y los alrededores. Como promotor cultural ha compartido con la comunidad el pigmento que recrea para uso artístico, artesanal, textil y otras aplicaciones. Actualmente está organizando un festival llamado Primer Festival Internacional Azul Maya Ch’oj en coordinación con SDCELAR del Museo Británico, el H. Ayuntamiento de Dzan y autoridades involucradas en el proyecto, que tendrá lugar el Domingo 7 de Agosto en Dzan.
Para más información sobre el proyecto ‘Azul Maya’ con SDCELAR y el Museo Británico, visita
https://www.sdcelarbritishmuseum.org/collections-es/azul-maya/?lang=es